Este trabajo busca analizar el caso Philip Morris contra Uruguay (caso número ARB/10/7 del Centro de Arreglo de Diferencias relativas a Inversiones (CIADI)), en particular en lo que refiere al rol de los condicionantes domésticos (internos) y sistémicos (externos) en el diseño de la política exterior de Uruguay en torno al surgimiento y desarrollo de la controversia. En vistas de tal objetivo, se parte de los aportes de Russell (1990) y van Klareven (1992) al estudio de la política exterior  en tanto política pública que le permite al Estado articular y lograr objetivos de manera independiente de las demandas o intereses de entidades internas o externas, en tanto goce de autonomía (Russell y Tokatlian, 2001).

En este marco, se analizan como condicionantes domésticos la política antitabaco desarrollada desde 2005 y la posición del Estado frente a los tratados bilaterales de inversión (TBI) como mecanismo de protección de inversiones extranjeras. En cuanto a las condicionantes sistémicas, el trabajo las divide de acuerdo a su origen en el sistema-región y en el sistema-mundo. En el primer grupo se analizan las reformas estructurales propuestas por el consenso de Washington en la década del noventa, y los cuestionamientos y la búsqueda de alternativas surgidos desde la década del 2000, frente al creciente número de demandas de inversores extranjeros ante instancias internacionales de arbitraje, como ser el CIADI. En el segundo grupo, se examina el debate internacional en torno al sistema de solución de controversias inversor-Estado y las medidas sugeridas por el Convenio marco sobre control del tabaquismo (Organización Mundial de la Salud).

Una de las principales conclusiones a las que arriba el trabajo se centra en la colisión entre las condicionantes a nivel de la política exterior uruguaya, al punto de generar posibles planteos contradictorios.