Última modificación: 2012-05-02
Resumen
Toda actividad humana modifica el entorno de diversas maneras afectando los recursos.
Acotamos el proyecto a un encuadre que sirva al Diseño Industrial como actividad que proyecta elementos a producir industrialmente, empleando insumos y produciendo desechos indeseables, incluidos los mismos productos.
En ese contexto se considerará la relación entre cierto recurso material, con el agua y la energía empleadas en su formación hasta llegar a ser insumo para una producción industrial.
Nuestra hipótesis:
Producir consume agua. Atendiendo a los conceptos de agua virtual y huella hídrica, cada material implicará una cierta cantidad de agua necesaria para llevarlo a su estado de utilización industrial.
Un par de datos suministrados por la WFO[1]: agua virtual en: Soja = 1600lts/kg, o Carne vacuna = 15500 lts/kg.
Pretendemos encontrar los valores correspondientes para diversos materiales emblemáticos para el diseño. Al momento hemos estimado que obtener 1kg la lana[2] cruda sin tratar, implicaría entre 400 y 600lts de agua.
Para la energía proponemos un enfoque análogo al del agua aplicando conceptos de energía virtual y huella energética.
Abordaremos diversos materiales tales como: papel, madera, plásticos, metales, textiles, etc. Con ellos el diseñador podrá estimar las cantidades de agua y energía necesarias el producto proyectado.
La fase siguiente, en términos de diseño industrial, corresponde a los procesos y métodos de eco-diseño. En ellos, materiales y procesos industriales se consideran en la etapa proyectual de productos aplicando conceptos como “de la cuna a la tumba” y, actualmente, “de la cuna a la cuna”. Se incorporan así, capacidades que permitan su desarme, reciclado y el reúso de materiales y componentes para la elaboración de nuevos productos, minimizando, y de ser posible evitando, impactos ambientales negativos.
[1] Water Footprint org.
[2] Fuentes: INTA, INTI, Aguas Cordobesas.